Pesto de espinacas
Aunque el pesto es de color verde, en sus ingredientes no se suele encontrar las espinacas. Su característico color se lo da las hojas de albahaca, pero no hay ninguna razón para no poder integrar unas hojas de espinaca en tu versión de la salsa de pesto.
Aunque en el supermercado hay varias marcas de salsa pesto muy logradas, me encanta hacerlo en casa para poder crear mis propias versiones con los ingredientes que me apetezcan.
¿Qué tienes unas espinacas que se van a echar a perder? Pues las añadimos a la salsa. ¿Qué prefieres unas hierbas aromáticas? Es una forma absolutamente fantástica de utilizar hierbas.
Sólo tardo 3 minutos en hacerlo con un picador, y su color y su sabor me encanta.
Yo suelo hacer esta receta de pesto con hojas de espinacas en lugar de albahaca porque siempre tengo una bolsa abierta por la nevera.
Además, el sabor de las espinacas no es tan fuerte como la albahaca y a mis hijos les gusta más.
Lo que si hago es añadir albahaca seca para condimentar.
Y ahora sólo tienes que añadir tu salsa de pesto casera a tu pasta hecha en casa. Es súper fácil hacer pasta casera, no puedes dejar de hacerlo, aunque sea sólo una vez.
Estos son los ingredientes que vamos a necesitar para hacer la receta:
- 2 y 1/2 cucharadas de albahaca seca
- 4 dientes de ajo
- 2 tazas de espinacas frescas
- 60 ml de aceite de oliva virgen extra
- 1 taza de piñones tostados
- 1 cucharadita de sal
- 1 y 1/2 cucharaditas de zumo de limón
- 1 cucharadita de azúcar
- 25 gr de queso parmesano
Instrucciones para elaborar la receta:
Para hacerlo más fácil todavía, vamos a hacer la receta econ un picador o procesador de alimentos.
Ponemos las espinacas, los dientes de ajos pelados y picados por la mitad, la albahaca y la mitad del aceite de oliva en el recipiente del procesador de alimentos o del picador.
Le damos al botón y lo picamos todo a alta velocidad durante unos segundos, hasta que veamos que esté bien picado.
Incorporamos el resto del aceite de oliva, los piñones tostados, la sal, el zumo de limón, el azúcar y el queso parmesano. Volvemos a pulsar el botón otra vez durante unos segundos, hasta que todos los ingredientes estén bien picados.
Si es necesario, podemos remover los ingredientes con una cuchara para que se bajen de las paredes del recipiente y se distribuyan bien.
Ya estaría listo el pesto.
Notas.
- Me gusta añadir un poco de queso parmesano al pesto acabado.
- Cuando lo guardes en la nevera, ponle una película de aceite en la superficie para que se mantenga fresco.
- Los piñones los puedes tostar en una sartén con unas gotas de aceite de oliva, hasta que justo se empiecen a dorar.
- Se puede guardar el pesto en la nevera durante unos 3 días.